Uno de los motivos típicos de la Navidad es el ramo de acebo. A mí particularmente me encanta bordarlo, pues queda muy colorido y alegre. Se puede bordar en toallas, cuadros, manteles individuales, etcétera.
En mantelerías grandes (de 3 x 1,5 metros) queda fantástico, pues ver cincuenta ramos o más en distintas direcciones (y sus correspondientes cenefas) hace que quede una mesa preciosa.
El de la fotografía es un cuadro con iniciales que bordé hace unos años, bordado en tela de lino, a punto de cruz de dos hilos. El de debajo es un mantel de té en tela de panamá, también bordado a dos hilos en punto de cruz.
Espero que os guste, y os deseo Feliz Navidad a todos.